Martín Cooper, el visionario de la telefonía móvil y galardonado con el prestigioso Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica en 2009, ha sorprendido al mundo con su predicción de un futuro en el que los seres humanos llevarán dispositivos de comunicación implantados en sus cuerpos.
Este impactante anuncio se realizó durante un inspirador encuentro con estudiantes y profesores de la Universidad de Oviedo, celebrado en la Escuela Politécnica de Gijón. Según Cooper, llevar un simple auricular en la oreja conectado a un teléfono móvil se considera obsoleto en la era actual de la tecnología. En su visión, la tecnología actual tiene el potencial de desarrollar terminales que pueden ser implantados en el cuerpo humano.
Para hacer realidad esta visión, Cooper sugiere que estos diminutos dispositivos podrían ser insertados detrás del oído y controlados exclusivamente mediante comandos de voz, marcando así un cambio significativo en nuestra forma de comunicarnos.
Uno de los avances tecnológicos que podría hacer viable este concepto es la tecnología NFC (Comunicación de Campo Cercano), que ya se utiliza en tarjetas de pago sin contacto y teléfonos inteligentes. Algunos implantes de telefonía móvil podrían aprovechar esta tecnología para facilitar la comunicación y el intercambio de información de manera segura y eficiente. Se ha propuesto, por ejemplo, un chip NFC que se implantaría en la piel entre el pulgar y el índice, una zona con pocas terminaciones nerviosas, lo que minimizaría las molestias durante la implantación.
En cuanto a la capacidad de almacenamiento de estos dispositivos implantables, se contempla la posibilidad de utilizar una cápsula de borosilicato de 16 mm de largo y 2 mm de ancho. En su interior, aloja una bobina de cobre con una placa que tiene una capacidad de 2 Kb para almacenar información. La gestión de esta información se realizaría mediante un lector y una aplicación especializada.